Las bajas temperaturas son uno de los quebraderos de cabeza más comunes en las casas. De ahí que los aislamientos ecológicos siempre hayan supuesto una gran opción para resguardar a las viviendas del frío exterior. Además, estos tipos de aislantes tienen el atractivo adicional de contar con un ahorro energético muy conveniente para los consumidores.
¿Qué son los aislantes ecológicos?
Te estarás preguntando qué es un aislante ecológico, ¿verdad? Resumiéndolo mucho, se trata de un aislante de este tipo cuando el producto que lo forma no ha sido intervenido ni transformado. Es decir: es un producto 100% natural y conserva todas sus características y ventajas de origen.
Para ayudarte a distinguir a un verdadero aislante ecológico de otro que no lo es, te pasamos estos puntos a tener en cuenta:
- Debe ser renovable, ya que se supone que es un material que se encuentra en la naturaleza.
- Debe ser reciclable y degradarse con facilidad.
- Debe ser eficiente, obviamente tiene la eficiencia energética como eje.
- Debe ser ecológico y no contaminar (nada de derivados del petróleo entre sus componentes).
En general, muchos de los aislantes utilizados en el sector de la construcción no cumplen los puntos de arriba. Suelen ser sometidos a procesos químicos y poco sostenibles con el medio ambiente. Por ello debes tener muy claras todas las características para que no te den gato por liebre en los aislamientos ecológicos.
Beneficios del uso de los aislantes ecológicos
Aunque económicamente pueda parecer que optar por otro tipo de materiales es un mejor negocio, la realidad es que a la larga los aislantes ecológicos te ayudarán a ahorrar más dinero, además de ser una excelente decisión para el medio ambiente.
Te desglosamos, a continuación, todas las ventajas de optar por los aislamientos ecológicos.
- Tienen una muy buena capacidad térmica, evidentemente.
- Gran aislamiento acústico, minimizando notablemente los distintos ruidos del exterior.
- Al ser biodegradables y reciclables, se usa muy poca energía para fabricarlos (por lo que su huella ecológica es casi nula)
- No tienen químicos ni aditivos peligrosos en su composición.
- Poseen una mayor durabilidad que los aislantes no naturales.
- Ayudan a la prevención de las humedades
- Mejora de la circulación del aire en el interior de la vivienda.
7 tipos de aislantes ecológicos
El mundo de los aislantes ecológicos es muy grande y en él dispones de muchas opciones interesantes para aislar térmicamente tu casa. En la siguiente lista te los diferenciamos por tipo de material y ventajas de elegirlos,
- Corcho. Dentro de los distintos materiales en el mundo de los aislamientos ecológicos , el corcho es el más utilizado. Es uno de los más efectivos y, obviamente, es un material reciclable y renovable. Suele usarse en forma de paneles y tiene como características principales la impermeabilidad a líquido y gases.
- Lino. Procede de una planta que se cultiva fácilmente y tiene un bajo impacto medioambiental, lo que lo convierte en uno de los materiales más sostenibles de la lista. Se obtiene en forma de fibras reciclables que son usadas como aislantes o para fabricar piezas textiles.
- Celulosa. La principal ventaja de la celulosa radica en su capacidad de almacenamiento del calor y su aislamiento de los ruidos externos. Su mayor componente es papel de periódico reciclado (más del 90%) junto a otros aditivos de origen natural. Es muy moldeable ya que se forma en bloques de masa homogénea y totalmente adaptable.
- Lana de oveja. Se obtiene de esquilar el animal en diferentes ocasiones a lo largo de su vida. En general se trata de una materia prima de bajo coste, sobre todo en aquellos lugares donde hay una presencia notoria de ovejas. Este aislante mejora su capacidad de aislamiento cuando se humedece.
- Arlita, perlita y vermiculita. Estos pertenecen a los aislantes minerales naturales y no tienen ningún aditivo tóxico entre sus componentes. Son algunos de los más frecuentes en la construcción y entre sus características más destacadas está su porosidad y de leve peso. Son muy buenos protectores contra el fuego.
- Geopanel. Este aislante natural está compuesto en un 80% por algodón y un 20% de otros materiales textiles reciclados. Tiene una gran densidad y dura mucho tiempo. Se suele utilizar mucho en zonas muy expuestas al vapor de agua. Uno de sus usos más comunes es el de aislante para suelos laminados (ya sea de cerámica o de parquet).
- Cáñamo. Una fibra totalmente natural que procede de la planta del cannabis y que posibilita la creación de mantas aislantes que transpiran muy bien. Destaca como aislante térmico y acústico, además de tener una conductividad muy favorable.
Ya tienes una idea general de los distintos materiales que tienes a tu alcance para aislar térmicamente tu vivienda. Y recuerda: apostando por cualquiera de estos tipos de aislantes naturales estarás contribuyendo a la salud de tu economía y a la sostenibilidad del planeta.