Tu casa es el lugar en el que deberías sentirte más cómodo, a gusto y seguro. De hecho, el diseño arquitectónico ha ido evolucionando hacia edificaciones cada vez más confortables, pero no se ha conformado con esto. La nueva tendencia en el diseño de hogares son las viviendas saludables, que buscan promover el bienestar también a nivel de salud. ¿Qué es la vivienda saludable y su importancia? os lo contamos.
¿Qué son las viviendas saludables?
Es un espacio residencial que proporciona las condiciones óptimas para la salud física, mental y social de sus moradores. Han sido diseñadas para minimizar el impacto de los riesgos ambientales sobre la salud, y de esta forma se promueve el bienestar general.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha remarcado algunas de las condiciones que deben cumplir las viviendas para entender que estas son saludables:
- Aislamiento térmico para proteger frente al frío.
- Sistemas de climatización y ventilación adecuados para reducir el exceso de calor en los interiores.
- Elementos de seguridad que garanticen la seguridad.
- Medidas de accesibilidad.
- Reducción del hacinamiento de los habitantes.
¿Cuál es la importancia de las viviendas saludables?
La mayoría de la población pasa algo más del 80 % del tiempo en espacios cerrados y, con frecuencia, estos están tanto o más contaminados que el exterior. De ahí que las malas condiciones de habitabilidad constituyan un riesgo para la salud de las personas, y que sea necesario adoptar medidas.
Lo que buscan las viviendas saludables es mejorar el bienestar y la salud a diferentes niveles:
Salud física
En estas casas se da especial importancia a la calidad del aire interior y la humedad ambiental, lo que ayuda a prevenir el desarrollo de enfermedades respiratorias como el asma o las alergias. A la vez, una buena ventilación y el uso de materiales de construcción no tóxicos reducen la exposición a contaminantes y al moho, lo que también previene las afecciones de tipo respiratorio.
Por otro lado, un buen suministro de agua potable y unos sistemas de saneamiento eficientes previenen la propagación de enfermedades infecciosas relacionadas con el agua, como la gastroenteritis.
A ello hay que sumar qué, un buen aislamiento térmico y sistemas de climatización eficientes, previenen problemas de salud asociados con temperaturas extremas, como la hipotermia y los golpes de calor.
Salud mental
Las viviendas saludables potencian la luz natural, junto con la calidad del aire y los espacios verdes, de forma que todo ello contribuye a crear una ambiente tranquilo y relajante que permite rebajar los niveles de estrés y ansiedad.
El buen aislamiento acústico de este tipo de inmuebles favorece una buena calidad del sueño, lo que es esencial para el bienestar mental y físico.
El diseño ergonómico y la accesibilidad que se sigue en estos diseños facilitan la creación de espacios personales y privados, que promueven un sentido de seguridad y bienestar.
¿Qué características tienen las viviendas saludables?
Algunas de las ventajas de las casas autosuficientes y de las casas ecológicas también están presentes en la vivienda saludable, porque comparten características como el uso de materiales naturales y un fuerte interés en la mejora de la calidad del aire y del confort térmico.
De las viviendas saludables se puede destacar especialmente:
Materiales y diseño
Lo habitual es escoger materias primas que sean lo más naturales posible y que estén libres de componentes que puedan resultar perjudiciales para la salud.
Calidad del aire
Cuentan con sistemas de ventilación que garantizan un buen aporte de aire desde el exterior y la expulsión del aire viciado al exterior.
Sistemas como el de ventilación cruzada consiguen este objetivo y, a la vez, reducen la humedad ambiental. El resultado es un aire interior limpio y libre de patógenos.
Aislamiento acústico y térmico
Tanto el exceso de ruido como el exceso de calor o de frío dentro de casa pueden afectar a la salud de las personas a nivel físico y mental. Por ello, en la vivienda saludable se da especial importancia al aislamiento, creando interiores que propicien el bienestar y la tranquilidad, así como una temperatura óptima tanto en verano como en invierno.
Iluminación apropiada
En los diseños arquitectónicos saludables se le intenta dar todo el protagonismo posible a la luz natural, que es esencial para un correcto funcionamiento del organismo y una buena regulación de los ritmos circadianos.
Se potencia también la iluminación artificial, de forma que esta resulte óptima en cada estancia y se pueda adaptar a diferentes necesidades a través de reguladores de intensidad.
Espacios verdes
Se prioriza el acceso a espacios verdes que mejoran la calidad del aire y promueven el bienestar. Si no es posible que la vivienda cuente con un espacio abierto, entonces se intenta potenciar la presencia de plantas de interior.
¿Cómo se puede construir una vivienda de este tipo?
La construcción de un inmueble de este tipo implica partir de un enfoque integral que tenga en cuenta factores de salud, seguridad, sostenibilidad y bienestar.
El primer paso es escoger un entorno tranquilo que ofrezca un aire limpio. Una vez que está clara la ubicación, se hace un diseño que tiene en cuenta la orientación solar, los vientos predominantes y el clima local, para maximizar la eficiencia energética y el confort térmico.
Para la construcción se utilizan materiales no tóxicos, y es habitual recurrir a materiales sostenibles como la madera reciclada o la madera certificada de bajo impacto ambiental.
Se da la máxima prioridad posible a los sistemas de aislamiento térmico y de ventilación; así como a la iluminación natural y artificial, para garantizar también el confort lumínico.
Construir viviendas saludables requiere de una planificación cuidadosa y tener en cuenta múltiples factores que pueden afectar al bienestar y la salud de sus moradores. Si quieres una casa eficiente, sostenible y saludable, contacta con Ökohaus para conocer nuestras casas pasivas.